Entrevistamos a Miquel Giménez, director de operaciones de la promotora inmobiliaria Groinversia, perteneciente al grupo Grocasa. Con él charlamos de la situación actual, la financiación participativa y de sus proyectos.
¿Cómo os ha afectado la crisis del COVID-19?
Durante marzo y abril hemos visto una caída en visitas orgánicas a nuestro sitio web del 60% y un incremento considerable en nuestro coste por lead, no obstante, hemos visto que estos indicadores están muy cerca de volver a su “normalidad” este mes de junio por lo que somos optimistas. De igual manera, no hemos visto en ningún momento que las personas dejen de preguntar en redes sobre nuestros inmuebles, por lo que estamos trabajando en mantenernos relevantes y presentes con nuestros clientes. Sabemos que las personas tienen interés en nuestros inmuebles y aunque tarden un poco más en decidirse, asistiremos a nuestro cliente en su proceso de compraventa de la manera más segura y estratégica.
Los clientes nos transmiten que no han perdido el interés en la compra pero que están en un momento de “wait to see”, esperar para ver cómo evoluciona el mercado inmobiliario y la economía en general, posponiendo las decisiones de compra.
¿Cuál ha sido vuestra respuesta frente a esta situación?
Hemos apostado de forma intensiva por la digitalización para llegar de forma óptima a todos nuestros clientes. Toda la información sobre nuestro producto está disponible y se puede consultar más extensamente en nuestra página web o directamente con un asesor.
En relación a vuestros dos proyectos financiados a través de StockCrowd IN, ¿por qué optáis por la financiación participativa o crowdfunding inmobiliario?
Por la agilidad que ofrece respecto a los canales de financiación tradicionales, el alcance que tiene a nivel digital, así como la posibilidad de hacer branding.
¿Trabajáis también con bancos?
Si, actualmente tenemos financiadas las promociones de obra nueva a través de bancos.
¿Cuál es vuestra estrategia actual frente a las circunstancias extraordinarias que vivimos?
Mientras nos enfrentamos a retos en común como sociedad, nuestra misión de transformar las vidas de las familias en nuestras comunidades permanece constante y hemos respondido al llamado de maneras en las que nunca antes lo hemos hecho.
Creemos que es el momento de apostar fuertemente por la digitalización y adaptarnos a las nuevas necesidades de nuestros clientes. Desde el comienzo del estado de alarma, hemos visto un cambio radical en el comportamiento de nuestros potenciales clientes, sus motivos de compra / venta, edad, dudas, maneras y tiempos de consumo. Estamos haciendo un trabajo de “auto-exploración” para adaptar nuestro propio branding a la nueva realidad de nuestros clientes, digitalizar nuestros procesos y mantenernos relevantes. Tenemos proyectos muy interesantes (y grandes) entre manos que estaremos encantados de compartiros muy pronto.
Vuestro último proyecto en Viladecans, ¿qué fue lo atractivo que vieron los inversores que se cerró tan rápido?
Creemos que hemos sabido llegar de forma adecuada a los inversores a la hora de presentar tanto el proyecto como el equipo que está detrás, además de la oportunidad en sí, también valoramos el capital humano y la transparencia.
¿Crees que la financiación participativa es una opción que se consolidará en vuestra estrategia y en el mercado?
Sí, es una opción que valoramos positivamente para aquellas oportunidades de rehabilitación con alta rotación (proyectos entre 8 a 10 meses), los bancos no suelen entrar a financiar operaciones que no sean promociones de obra nueva, la financiación participativa (o crowdfunding inmobiliario) se ha presentado como una oportunidad para potenciar nuestra división de segunda mano (Estudio Gremial Inversión e Inmuebles Groinversia) por su agilidad y capacidad para posicionar nuestra marca a nivel digital.