Barcelona enamora. La Ciudad Condal es todo un referente a nivel internacional. ‘Culpa’ de ello la tiene su belleza, el encanto de sus barrios y la increíble arquitectura de sus edificios.
Se trata de una ciudad cosmopolita y, gracias a su clima mediterráneo, es una de las ciudades con mejor calidad de vida para trabajar.
Además de por estas razones, invertir en Barcelona es una buena opción dada su increíble comunicación con el exterior, ya que dispone de trenes de alta velocidad y de aeropuerto que vuela a prácticamente todos los destinos internacionales. De hecho, El Prat obtuvo el pasado 2019 un récord de viajeros con más de 52 millones entre todas sus terminales.
Por otro lado, su puerto, uno de los más importantes a nivel nacional y europeo. Registra un tráfico de alrededor de 65 millones de toneladas anuales de mercancías, donde China es uno de sus principales socios comerciales como puerta de entrada a Europa.
También disfruta de una increíble conexión con Latinoamérica y con el resto de países europeos.
Barcelona es una Ciudad Inteligente. Su apuesta por las por las nuevas tecnologías, por la creación y el fomento de las Start-ups con ferias que son referentes mundiales como el FY4N o el Mobile World Congress demuestran un espíritu emprendedor e innovador.
De hecho, de las casi 5.000 empresas extranjeras con sede en Cataluña, el 90% se encuentran instaladas en Barcelona. Se trata de una ciudad que es un referente a nivel industrial y de negocios.
Por todas estas razones, la Ciudad Condal atrae cada año multitud de inversiones, y el sector inmobiliario no podía ser menos.
En una ciudad en constante movimiento, con un gran atractivo económico, turístico y laboral hacen de la compra, venta, alquiler, reforma o construcción de nuevos espacios, viviendas, locales u oficinas un activo por el que apostar.
Las perspectivas no pueden mejores. Según datos del INE, en 2017 se registró un aumento del 6,2% del precio de los activos inmobiliarios, por lo que la inversión inmobiliaria es ‘casi’ una garantía de éxito.
Además, y gracias al aprendizaje sobre el ‘boom’ inmobiliario de hace una década, las entidades financieras tradicionales son más selectivas en la concesión de créditos e hipotecas, con lo que el mercado se encuentra mucho más regulado para evitar una nueva burbuja.
Aún así es cierto que muchos clientes o usuarios de los bancos o entidades tradicionales guardan un cierto recelo por este tipo de empresas.
Es por ello que la financiación participativa o el crowdfunding inmobiliario se ha convertido en la alternativa perfecta para participar en el real estate de una manera más segura, cómoda, transparente y donde se obtienen unas mejores rentabilidades, que van desde un 9% hasta un 25% anual.
Tecnologías como la que dispone StockCrowd IN ofrece a las grandes firmas inmobiliarias acercar sus promociones a los usuarios a través de internet, como el proyecto de Diagonal 440 lanzado en StockCrowd IN, que ya se completó y entregó una rentabilidad del 9% a todos sus inversores.
Así Barcelona, además de tener los más variados atractivos turísticos y de negocio, se suma a las ciudades pioneras de Europa que han adoptado el crowdfunding inmobiliario com un vehículo más de promoción e inversión inmobiliaria.
El crowdfunding inmobiliario supone una alternativa perfecta para inversores que anteriormente no podían acceder a este tipo de oportunidades y que ahora pueden diversificar más su cartera. Del mismo modo, permite a inversores más pequeños empezar su andadura en el mundo inversionista.
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