Empezamos hoy con esta nueva entrada en nuestro blog , una serie de artículos acerca de los puntos...
El auge del Fintech en España
La tecnología está cambiando el mundo financiero tradicional. La desconfianza que las entidades despertaron en los clientes en la crisis económica unida a la gran revolución digital ha transformado el panorama en el sector. El Fintech ha llegado para quedarse.
A nivel europeo, Reino Unido destaca por encima de Alemania, Francia o Suecia en la acogida que las entidades nativas digitales han tenido sobre todo entre el público millenial (los nacidos entre las décadas de los 80 y los 90). De hecho, es muy común que los jóvenes londinenses realicen el pago de sus flat white (el café de moda en la ciudad) con entidades desconocidas hasta hace pocos años (Revolut, Monzo, N26…). El ahorro en el cobro de comisiones a la hora de hacer transferencias bancarias, poder realizar toda clase de gestiones a través del smartphone sin tener que acudir a la oficina o su imagen mucho más cool y moderna genera confianza en los jóvenes.
De hecho, sólo en este país, el valor de las inversiones en fintech creció un 35% en 2018 con respecto a 2017, incrementándose en este periodo un 19% el número de operaciones, tal y como indica la consultora Accenture y recoge Expansión.
Y en España, ¿somos proclives al fintech?
Bien es cierto que nuestro país debe de mejorar, en primer lugar, en cuanto a conocimientos financieros se trata. Según la Encuesta de Competencias Financieras realizada por el Banco de España y la CNMV un 46% de la población española reconoce que su educación financiera es baja, y sólo un 8% afirma que posee altos conocimientos.
Aún con este dilema a resolver, nuestro país es uno de los territorios que mejor se ha adaptado a las Fintech. Tal es así que, como indica el informe realizado por la gestora Finanbest, España ocupa la sexta plaza mundial en el uso de servicios relacionados con el Fintech.
De hecho, los españoles contratamos alrededor del 65% de nuestros productos financieros de manera digital. Como en el Reino Unido, nosotros también preferimos cada vez acudir en menor medida a las oficinas a la hora de contratar servicios. Los públicos que pertenecen a franjas de edad de 26 a 35 años (los millenials) o entre 36 a 45 años, los eligen en un 70%.
Finalmente, además de en nuestra formación financiera, también debemos de mejorar en el ahorro. Asignatura pendiente entre los encuestados por la plataforma de productos de ahorro Raisin, donde se puede extraer que el 30% de los participantes en este informe declaran que no disponen de un plan o sistema de ahorros definido, atesorando menos de 6.000 euros al año entre los entrevistados de 35 a 55 años.
Quizás sea este el motivo por el que la Fundación de Cajas de Ahorros (FUNCAS) afirma que el producto estrella que los españoles contratamos de manera digital sean los préstamos personales. Su contratación online ha aumentado en los últimos años, a la par que las plataformas de crowdlending que conceden créditos a través de inversiones participativas.
Una de las maneras de capitalizarse y obtener rentabilidad de los ahorros es a través de las oportunidades de inversión que ofrece el crowdfunding inmobiliario. Con inversiones que pueden empezar en apenas 50€, cualquiera puede convertirse en inversor y aumentar sus ahorros accediendo a las altas rentabilidades del sector inmobiliario. Y tú, ¿eres ya un inversor inteligente?